La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud como un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de enfermedad o dolencia. Esta definición, conocida como salud integral, se enfoca en el bienestar general del individuo en todas las áreas de su vida.
La salud integral es un concepto que ha tomado mayor relevancia en los últimos años, ya que cada vez se reconoce más la importancia de considerar no solo la salud física, sino también la salud mental y social de las personas. En este artículo, profundizaremos en la definición de salud integral de la OMS y su importancia en la promoción de un estilo de vida saludable y equilibrado.
Qué es la salud integral para la OMS
La Organización Mundial de la Salud define la salud integral como un estado de completo bienestar físico, mental y social y no solamente la ausencia de enfermedad o dolencia.
Este concepto de salud integral implica que el cuerpo humano está interconectado con la mente y el entorno social en el que se desenvuelve. Por lo tanto, la salud integral no solo se centra en la prevención y el tratamiento de enfermedades, sino también en la promoción del bienestar y la calidad de vida.
La OMS reconoce que la salud integral es un derecho fundamental de todos los seres humanos y que es necesario trabajar en todos los ámbitos de la sociedad para garantizar su acceso y disfrute.
Para lograr la salud integral, es necesario adoptar un enfoque holístico y multidisciplinar que tenga en cuenta todos los factores que influyen en la salud de una persona, como son el estilo de vida, la alimentación, el entorno laboral, el entorno social y familiar, la genética, entre otros.
Además, la OMS reconoce que la salud integral no es un estado fijo o estático, sino que es un proceso continuo y dinámico que requiere la participación activa de la persona en su propio cuidado y bienestar.
La salud integral es un concepto que ha sido definido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como un estado completo de bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de enfermedades.
Para alcanzar la salud integral, es importante tomar en cuenta diferentes factores que afectan a la persona en su vida cotidiana. Entre estos factores se encuentran la alimentación adecuada, el ejercicio regular, el descanso suficiente y la ausencia de factores de riesgo ambientales.
La OMS también reconoce la importancia de la salud mental en la salud integral. La salud mental es un estado de bienestar en el cual la persona es capaz de desarrollar sus habilidades, manejar el estrés y contribuir a su comunidad.