Los roles de género son estructuras sociales que determinan las expectativas y comportamientos que se consideran apropiados para cada género en una determinada cultura. Estas expectativas pueden incluir la forma en que se espera que nos comportemos, vistamos, hablemos y trabajemos, entre otras cosas. Los roles de género también pueden influir en nuestras relaciones interpersonales, en la forma en que interactuamos con los demás y en la forma en que nos percibimos a nosotros mismos.
Es importante entender cómo estos roles de género influyen en nuestra vida diaria, ya que pueden limitar nuestras oportunidades y elecciones, así como crear desigualdades de género. En este artículo exploraremos más a fondo qué son los roles de género y cómo afectan nuestra vida cotidiana.
Cómo influye el género en la vida
El género es una construcción social que se utiliza para diferenciar a las personas en base a su sexo biológico. Desde el momento en que nacemos, se nos asigna un género y se espera que sigamos los roles de género asociados con ese género.
Los roles de género son las expectativas y normas sociales que se aplican a cada género. Por ejemplo, se espera que los hombres sean fuertes, valientes y dominantes, mientras que a las mujeres se les enseña a ser dulces, sumisas y cuidadoras. Estas expectativas se reflejan en la forma en que se nos educa, en las relaciones que tenemos y en las oportunidades que se nos presentan.
La influencia del género en nuestra vida diaria es innegable.
Desde la forma en que nos vestimos, hasta la forma en que hablamos y nos comportamos, todo está influenciado por nuestra percepción del género. El género también afecta nuestras relaciones interpersonales, ya que se espera que los hombres y las mujeres interactúen de manera diferente entre sí.
En el ámbito laboral, el género puede influir en las oportunidades que se nos presentan. A menudo, a las mujeres se les paga menos que a los hombres por hacer el mismo trabajo, y también pueden ser discriminadas en la contratación o promoción. Además, algunos trabajos son considerados “trabajos de mujeres” o “trabajos de hombres”, lo que limita las opciones de carrera de cada género.
Los roles de género son una construcción social que se ha ido transmitiendo de generación en generación y que influye en nuestra vida diaria de formas que a veces ni siquiera nos damos cuenta. Desde pequeños, nos enseñan lo que se espera de nosotros según nuestro género, y esto nos lleva a comportarnos de una manera determinada.
Es importante entender que estos roles son arbitrarios y que no tienen una base biológica. Las diferencias entre hombres y mujeres no son tan marcadas como se nos ha hecho creer, y muchas veces se deben más a la cultura que a la biología.
Los roles de género pueden influir en nuestra forma de relacionarnos con los demás, en nuestras expectativas de futuro, en nuestras decisiones laborales, en nuestra identidad sexual y en muchos otros aspectos de nuestra vida. Es importante cuestionarlos y no darlos por sentado, ya que pueden limitarnos y hacernos sentir fuera de lugar si no encajamos en los moldes establecidos.